Cuando esté en el campo y no esté seguro de si la imagen que está creando es buena, revise esta rápida lista de verificación mental para ver si su imagen contiene estos cuatro ingredientes esenciales.
1. Buena luz
La luz es, con mucho, el elemento más importante de una fotografía de paisaje. Una fotografía de un lugar impresionante tomada con la luz del mediodía se quedará plana. Una fotografía de un lugar aburrido tomada en ese momento perfecto cuando la luz es mágica se convertirá en una fotografía única y memorable.
En realidad, no creo que haya ningún tipo de luz que sea inherentemente mala. Solo tienes que saber qué hacer con las condiciones de luz que te dan.
Driftwood Beach en Jekyll Island, Georgia, Estados Unidos.
La luz de la hora dorada del amanecer y el atardecer suele ser un momento favorito para los fotógrafos. Mi momento favorito es la hora azul: el crepúsculo. Es difícil equivocarse con estos dos tipos de luz.
Cuando tenga un día con luz solar intensa y intensa, aproveche la oportunidad para buscar sombras interesantes.
El cielo blanco de un día nublado es un momento excelente para fotografiar primeros planos.
¿Y esos días tormentosos? Esos pueden ser los mejores de todos con las nubes dramáticas que acompañan a una tormenta.
2. Tema principal
Lo siguiente es asegurarse de tener un tema principal. Eso puede parecer bastante obvio, pero téngalo en cuenta. Puede que te encuentres, como hago a veces, haciendo una imagen de un paisaje general sin un tema claro. Es solo un poco de tierra con algunos árboles y tal vez algo de agua. Debes decidir cuál es el tema y eso te ayudará a crear una imagen más convincente.
Little Finland, Nevada, Estados Unidos.
Cuando llego a un lugar, me gusta pensar qué tiene ese lugar que me llamó la atención y lo convierto en el tema principal. Eso no quiere decir que no puedas volver tu atención a otro tema principal más adelante, pero si tienes demasiados sujetos en tu escena, ninguno de ellos será el tema principal y tu imagen será demasiado general para ser interesante.
Mientras pensamos en el tema principal, ¿qué es lo que le gusta de ese tema? Tener palabras descriptivas en tu cabeza cuando estás haciendo una imagen te ayudará a enfocarte y traer esa descripción a la imagen. ¿Qué es lo que te gusta del lago? ¿Es el reflejo? ¿La forma? ¿La tranquilidad? ¿Cómo está tan claro que puedes ver el fondo? Esto no solo te ayudará a transmitir el significado de tu imagen, sino que te ayudará a escribir sobre ella más adelante.
3. Fondo limpio
Tan importante como el tema principal es lo que hay detrás.
El desorden y los elementos que distraen pueden arruinar una buena imagen. Aquí es donde la perspectiva se vuelve importante. Debes encontrar un ángulo para fotografiar a tu sujeto para que no haya elementos que te distraigan en el fondo. Eso puede significar elevarse y disparar al sujeto para que el fondo se llene con una sola textura, o bajar y disparar hacia arriba para que el fondo se llene solo con cielo.
Intente aislar a su sujeto y simplificar la imagen tanto como sea posible.
Steptoe Butte en Palouse Hills de Washington, Estados Unidos.
4. Composición interesante
Me gusta pensar en la fotografía como lo opuesto a la pintura. Los pintores comienzan con un lienzo en blanco y comienzan a agregarle cosas, mientras que a los fotógrafos se les presenta una escena llena de detalles y deben comenzar a eliminar cosas de ella hasta que contenga solo los elementos más importantes de la escena. Luego, esos elementos deben organizarse para crear un diseño gráfico interesante.
Recuerde los componentes básicos de la composición en los que puede confiar para crear diseños gráficos interesantes:
- líneas
- curvas
- texturas
- patrones
- formas
- colores
- marcos
El "truco", si lo hay, es hacer que las cuatro cosas se unan. Se necesitará paciencia, perseverancia y un poco de suerte.