No es raro que los fotógrafos principiantes no estén seguros de cuánto cobrar por su trabajo. Muchos sienten que las estructuras de precios son el área más complicada de su negocio. Como resultado, estos fotógrafos se recortan y, sin saberlo, infravaloran su trabajo.
No se sienta abrumado. Elimine las conjeturas sobre el precio de su trabajo pensando en los siguientes aspectos:
1. Conozca su mercado: ¿Cuál es el valor medio del trabajo de los fotógrafos en su zona? Compare y contraste y decida dónde puede encajar su trabajo. No olvide evaluar su servicio, la calidad de las imágenes y el profesionalismo.
2. Conozca a su cliente: Algunas personas prefieren pagar más por un servicio si significa mayor calidad. Algunas personas no pueden pagar nada más que lo básico. Determine a qué clientes desea llegar y comience a organizar su estructura de precios desde aquí. Tome nota: a menos que se encuentre en círculos y escenarios similares a los de sus clientes potenciales, es posible que le resulte difícil mantenerse en un rango de precios más alto.
3. Evalúe su inversión: ¿Cuánto tiempo le dedicas a una sesión de senior? ¿Una boda? Evalúe las horas de preparación, conducción, filmación, edición, desarrollo, servicio, calidad e interacción. Cuando tenga una idea de sus horas de inversión por sesión, divida su precio por este número. ¿Cuánto gana realmente por hora? ¿Cuál es su retorno de la inversión?
4. Determine sus gastos: Todo fotógrafo tiene gastos que van más allá del tiempo invertido en una sesión. Aquí es donde muchos fotógrafos no logran "triunfar" en el negocio; no han aprendido a identificar los gastos adicionales de administrar este negocio fuera de los trabajos. Costos de equipo. Tiempo usado. Servicios. Presentación y empaque. Seguro. A menos que sus trabajos puedan cubrir estos gastos generales, le costará encontrar una forma de aumentar sus ingresos. Sume este número para obtener una cifra aproximada de cobertura adicional de sus trabajos.
5. Establezca sus trabajos: Totalice su tarifa por hora y sus gastos. Este es el número al que debe apuntar al fijar el precio de su trabajo. Una vez que haya sumado este número, divídalo por la cantidad de trabajos que le gustaría al año. Este número final es lo que debe cobrar por sus sesiones y rodajes. Por supuesto, es posible que deba ajustar sus precios más o menos, o aumentar la cantidad de trabajos a los que aspira. A este ritmo, podrá fijar el precio de su trabajo para maximizar su rentabilidad general.