Realmente no hay muchas escenas que puedan igualar el asombro de una montaña cubierta de nieve en una imagen de paisaje; pero capturar una imagen que podría hacer justicia a la escena no siempre es sencillo.
Aquí hay algunos consejos sencillos que le ayudarán la próxima vez que desee fotografiar montañas, colinas y valles en sus fotografías de viajes:
Se paciente
La fotografía puede ser increíblemente frustrante a veces, especialmente cuando el clima va en su contra; y muy pocas veces llegarás a un lugar y tendrás todo en su lugar para hacer una gran foto. A veces solo hay que tener paciencia y esperar el momento adecuado en que las nubes se dispersen o la niebla se disipe. El clima en las montañas, e incluso en las colinas, puede cambiar increíblemente rápido, así que asegúrese de estar al tanto de las previsiones meteorológicas antes de partir y siempre dígale a alguien adónde va y cuándo lo espera de regreso.
Eran las 9:30 pm y después de haber esperado casi una hora, el sol finalmente atravesó las nubes.
La iluminación es clave
En la fotografía de paisajes, a menudo solo la iluminación puede marcar la diferencia entre una buena toma y una gran toma. La luz de las primeras horas de la mañana y de la tarde le da a la escena un maravilloso brillo dorado y enfatiza las sombras. Piense de qué dirección proviene la luz y esté preparado para volver en otro momento al mismo lugar para captar la mejor luz.
La luz de la tarde ilumina maravillosamente el Eiger.
Piense en el primer plano
El hecho de que esté fotografiando una montaña en la distancia no significa que pueda olvidarse del primer plano; Las buenas imágenes de paisajes también suelen contener algo interesante cerca de la cámara. Así que la próxima vez que estés fotografiando a lo lejos, piensa en cómo podrías incorporar un árbol, un arroyo, algunas personas o animales, o incluso algunas rocas para darle a tu imagen más profundidad y también un sentido de escala.
Un primer plano interesante puede hacer que su foto se vea más atractiva y también guiar los ojos del espectador hacia la distancia.
Coloque su horizonte con cuidado
Tu horizonte es una de las partes más importantes de la foto. Piensa en la regla de los tercios y evita poner tu horizonte en el medio. Si la escena tiene un primer plano interesante o un cielo poco interesante (es decir, nubes blancas), coloque su horizonte alto. Alternativamente, si tiene interesantes formaciones de nubes o luz, puede colocar su horizonte más bajo para mostrar más del cielo.
Si el cielo no es un lugar interesante, coloque su horizonte más alto.
Piense en vertical
Naturalmente, la mayoría de las fotografías de paisajes se toman en formato de paisaje (horizontal); sin embargo, no tenga miedo de experimentar con la fotografía en retrato (vertical). Esto funciona especialmente bien si desea aislar una vista más estrecha de la escena y llevar al espectador a la distancia. Pero recuerde, su primer plano es posiblemente incluso más vital, ya que podría estar mostrando más.
Las líneas de esquí en la nieve y las dos personas muy pequeñas añaden un poco de interés al primer plano.
Adaptarse al clima
Los cielos tormentosos, la lluvia, la niebla e incluso la niebla pueden contribuir a que una foto se vea aún más dramática. Por tanto, si no recibe sol ni cielos azules, no se desespere; en su lugar, piense en cómo podría adaptar la imagen para que coincida con el estado de ánimo de la escena. No olvides tener paciencia; nunca se sabe, un hermoso cielo azul solo podría estar a unos minutos de distancia.
Las nubes ayudan a enmarcar la cima de la montaña en esta foto.
Hay pocas imágenes que cautivan a la audiencia como un hermoso paisaje montañoso, pero se necesita habilidad, trabajo duro y perseverancia para capturar tomas únicas y hermosas de áreas montañosas. Solo recuerde ser paciente, siga los consejos anteriores y estará en camino. Por favor, recuerde: ¡manténgase siempre a salvo!
Ahora es tu turno. Comparta sus fotos, pensamientos y consejos a continuación.