Con tanta frecuencia estamos atrapados en horarios agitados y revisamos los elementos completados de nuestras listas de tareas pendientes que no nos tomamos el tiempo para disfrutar realmente de nuestra experiencia fotográfica. Creo que la fotografía lenta puede ser una experiencia fabulosamente agradable e incluso terapéutica, especialmente cuando te das tiempo para darte un capricho.
Cuando tienes una cámara en la mano, puedes liberar tu mente y tus emociones de los problemas del día y adentrarte en otro mundo, uno de inspiración y expresión creativa. Pero debe ser consciente y tomarse un tiempo para lograrlo.
Ser paciente
La paciencia es una virtud y no debe ser exclusiva de los fotógrafos de aves y vida silvestre. Quizás estos géneros requieran algo más de paciencia, pero la fotografía callejera, los deportes, el paisaje y la mayoría de los otros tipos de fotografía requieren que disminuya la velocidad y se tome el tiempo para obtener las mejores imágenes posibles en la mayoría de situaciones.
Algunas de las mejores fotografías de la calle no se obtienen solo por la espontaneidad, sino por una planificación cuidadosa, la anticipación y la paciencia. Encontrar una excelente ubicación en las calles es una cosa, pero a menudo tendrás que esperar a que la mejor luz y la acción más interesante se presente en la ubicación elegida para capturar las fotografías más impresionantes.
Incluso los mejores fotógrafos deportivos se toman el tiempo de sus fotografías. El tiempo que invierten puede ser en estudiar más el juego o en conocer a los jugadores y entrenadores de los equipos que más fotografían.
Hacer esto les dará el conocimiento y las relaciones que les permitirán, en última instancia, capturar imágenes más dinámicas en el impulso del momento. Anticiparán más fácilmente el flujo del juego que alguien que no tenga experiencia y sepa poco o nada del carácter del equipo.
Observar
Tomarse el tiempo para observar el entorno en el que está fotografiando ayudará a incluir más sensación en sus fotos. En lugar de apresurarse a tomar algunas fotos tan pronto como llegue a su ubicación, deje su cámara en su bolso o estuche y simplemente observe lo que hay y lo que está sucediendo.
Utilice también sus otros sentidos, no solo sus ojos. Escuche, sienta, huela e incluso pruebe (cuando sea apropiado) para ser más consciente del entorno en el que desea tomar las fotos.
Date espacio para reducir la velocidad, dar un paso atrás y observar lo que sucede a tu alrededor. A menudo, descubrirá sujetos interesantes y fotogénicos que quizás no note si se mueve demasiado rápido y comienza a tomar fotos de inmediato.
Incorpora la fotografía a tu horario
Lleve su cámara a donde quiera que vaya. Al trabajo, escuela o universidad, cuando haces ejercicio, cuando vas de compras y cuando paseas al perro. Al hacerlo, aprenderá a ver su entorno habitual de diferentes maneras.
Hacer tiempo para usar su cámara todos los días es una de las mejores formas de mejorar su habilidad y técnica y de desarrollar su propio estilo único. Darse tiempo dentro del contexto habitual de su día puede parecer difícil o un poco extraño al principio. Pero a medida que se compromete a hacer esto, puede comenzar a encontrar formas en las que no había pensado para hacer fotos interesantes.
Piense fuera de la caja a medida que avanza en su rutina habitual. Haz que las cosas ordinarias de tu vida se vean extraordinarias en las imágenes.
Revisar ubicaciones y temas
A menudo, vale la pena tomarse el tiempo para visitar los mismos lugares varias veces y fotografiar los mismos sujetos más de una vez. Si vas a algún lugar solo una vez, nunca sabrás realmente si has obtenido las mejores fotos posibles.
Revisar las imágenes de su primera visita o visitas posteriores a una ubicación le ayudará a desarrollar un ojo más crítico. Luego, cuando regrese a ese lugar y tema, tendrá una perspectiva más experimentada de la que tenía al principio.
Si dedica tiempo a hacer esto, lo más probable es que disfrute más de la experiencia y produzca mejores fotografías.
Tenga cuidado de optar por lugares que realmente disfrute y en los que se sienta bien, ya que esto lo impulsará a regresar y buscar hacer mejores fotografías de las que ha hecho anteriormente.
En conclusión
Al permitirse el tiempo para reducir la velocidad y disfrutar usando su cámara, comenzará a ver una mejora progresiva en la calidad de sus imágenes. Continuar profundizando en técnicas que no dominaba anteriormente y experimentar con nuevos sujetos le ayudará a mantener la frescura en sus fotografías y disfrutará aún más de su tiempo fotográfico.
¡Quizás podamos hacer de la fotografía lenta la próxima moda popular!