Un pintor solo necesita mirar su paleta antes de aplicar color al lienzo. Los fotógrafos tienen un desafío diferente, ya que deben localizar sus tonos estudiando una escena. Por supuesto, esto puede ser fácil de pasar por alto cuando estás pensando en sombras, luces, profundidad de campo, velocidad de obturación y todos los demás detalles técnicos que se incluyen en una foto. Sin embargo, como dijo el gran pintor Kandinsky, "el color es un poder que influye directamente en el alma". Usarlo en sus composiciones puede infundir a su trabajo un nuevo nivel de sofisticación.
1) Separación de fondo
Para maximizar el efecto de los colores intensos, querrá comenzar buscando fondos oscuros y apagados. Este tipo de marcado contraste restará importancia a las áreas circundantes, atrayendo la atención del espectador directamente al sujeto. Por supuesto, la iluminación mixta puede engañar incluso a los sistemas de medición más sofisticados. Para obtener la exposición más precisa, use el medidor de punto interno de la cámara para tomar una lectura de la parte más brillante de la escena. Al subexponer deliberadamente aproximadamente media parada, los colores vibrantes adquirirán una tonalidad intensa y profunda.
2) Solo un toque de color
Si desea atraer a las personas a su fotografía, intente incluir solo una pequeña cantidad de color. Este método sutil le da importancia al sujeto al permitir que se destaque del resto del encuadre. Estas composiciones reflexivas cuentan con la ayuda de un enfoque diferente de la fotografía. En lugar de trabajar para agregar más interés visual, desea eliminar los colores competidores y simplificar el marco. Mientras mira por el visor, revise las cuatro esquinas cuidadosamente para ver si hay elementos que distraigan.
3) Corta el deslumbramiento
Cada otoño, las exhibiciones brillantes de follaje otoñal atraen a decenas de fotógrafos que buscan ese paisaje clásico al aire libre. Sin embargo, en muchas de estas escenas, el resplandor de las hojas húmedas y brillantes en realidad restará valor al color deseado. Una solución económica es agregar un polarizador circular a su equipo. A medida que gira el elemento frontal del filtro, verá que el reflejo de la superficie desaparece para revelar solo el color. Para mayor calidez, incluso puede ajustar el balance de blancos usando el ajuste preestablecido nublado o sombra.
4) Haz que brille con retroiluminación
De todas las direcciones de las que puede provenir la luz, quizás no haya mejor opción que disparar directamente al sol. Esto es particularmente cierto cuando se trabaja para enfatizar el color. Cuando se ilumina desde atrás, el sujeto parecerá brillar. Si el contraste es demasiado grande, elimine el sol del marco. Esto hará que la exposición sea más uniforme y, al mismo tiempo, brindará el espectacular beneficio de la retroiluminación. Si no se siente cómodo con la medición manual, realice varias tomas con la compensación de exposición. Poner entre corchetes de esta manera es una forma rápida de manejar un escenario que de otro modo sería complicado.
5) Establecer el estado de ánimo
Para un mayor impacto en su fotografía al aire libre, considere la posibilidad de utilizar colores complementarios. Aunque el azul y el amarillo se encuentran en lados opuestos de la rueda de colores, se pueden usar junto con resultados sobresalientes. En un lado del espectro, el azul es ideal para crear un ambiente tranquilo e introspectivo. Sin embargo, los tonos más cálidos infundirán al sujeto una energía dinámica. Cada uno es efectivo por sí solo, pero cuando se usa simultáneamente, el contraste llamará la atención sobre el tema principal.
6) Usa la silueta
Durante las horas mágicas que rodean el amanecer y el atardecer, disfrutará de una espléndida exhibición de color en el cielo. Mientras tanto, su sujeto probablemente estará en una sombra densa. Si expone correctamente al sujeto, el cielo se pondría pálido o incluso se desvanecería. Una opción sencilla para conservar el color vibrante es crear una silueta. Esto es especialmente útil con sujetos en movimiento cuando HDR es menos que ideal. Para hacer esto, simplemente exponga al cielo y deje que la tonalidad del sujeto se vuelva negra.
Conclusión
Para afinar su visión, concédase una tarea en la que capturar un color específico sea el único objetivo. Por ejemplo, salga a dar un paseo fotográfico sin un objetivo específico además de ver y disparar: rojo. En lugar de mirar a los sujetos literalmente, pensarás en colores. Al estudiar el mundo que lo rodea con esto en mente, es posible que se sorprenda de la cantidad de oportunidades que se revelan. Con la práctica, pronto reconocerá el color como un elemento esencial de la composición.